Nosotros, más de ciento cincuenta Jóvenes Líderes Mensajeros de Paz, participantes en el IV seminario para Jóvenes de América Latina, “Propuestas para una nueva civilización – Aportes de los jóvenes para alcanzar los Objetivo de Desarrollo del Milenio”, representando a la juventud de Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba, Chile, Ecuador, El Salvador, México, Panamá, Paraguay, Perú, Puerto Rico, República Dominicana, Uruguay y Venezuela, convocados por Mil Milenios de Paz y reunidos en Asamblea Parlamentaria en el histórico Recinto de la Cámara de Senadores de la República Argentina, con el apoyo de la Secretaría Parlamentaria, Coordinación de Cultura y Dirección de Eventos del Honorable Senado de la Nación a los 17 días del mes de septiembre de 2004, nos comprometemos a:
• Poner en práctica en la vida cotidiana los siguientes valores: paz, tolerancia, solidaridad, amor, bondad, libertad, respeto, cuidado, alegría, generosidad, cooperación y honestidad.
• Promover acciones tendientes a concretar una cultura de paz en nuestro ámbito cercano.
• Difundir y propiciar los Objetivos de Desarrollo del Milenio y los Manifiestos: ‘ Por la paz’ (2000), ‘Por la vida’ (2001), ‘Por el Futuro del mundo’ (2002), ‘Por el bien común’ (2003) y el creado durante este seminario ‘La Educación y los jóvenes en el nuevo milenio’ (2004).
Ejerciendo nuestros derechos a la libre expresión y a la votación democrática, hemos logrado consensuar una visión compartida y por lo tanto manifestamos que:
En el paradigma holista actual, en el que se interconectan aspectos como la educación, la comunicación, la política, el medio ambiente, etc., es necesario que sea la educación el “Lenguaje Universal” mediante el cual todas las comunidades del mundo se identifican y se interrelacionan.
Siendo la educación tanto causa como consecuencia del progreso y la evolución de todas las naciones que conforman nuestra aldea global, es necesario que nuestros ideales de desarrollo sean materializados. Con este objetivo proponemos:
Nosotros, como alumnos, buscamos en un educador una persona idónea, capaz de transmitirnos tanto conocimientos como valores morales; una persona responsable, justa, comprensiva y dinámica, una persona que desempeñe con vocación y amor hacia el trabajo, con profesionalismo y entusiasmo.
Pero como jóvenes y alumnos queremos el respeto, ya que esto debe darse de ambas partes, y debe ser mutuo para una comunidad tolerante y positiva. Los jóvenes queremos ser el futuro y es por esto que nos comprometemos a difundir y encarnar en el día a día los valores manifestados, siendo coherentes en nuestro actuar y verdaderos Mensajeros de Paz en nuestro entorno. Lo haremos mediante charlas y debates que cada uno efectuará en cualquier ocasión que nos sea posible; campañas de mensajes vía correo electrónico difundiendo nuestro manifiesto, en donde le hagamos llegar a cada persona nuestro sentir.
Nos proponemos:
Los jóvenes de este grupo propone que los funcionarios públicos del Tercer Milenio, sean gestores aplicando sus conocimientos y líderes transformando la realidad con hechos.
Es nuestro deseo, que el Funcionario Público en el Nuevo Milenio, en el ejercicio de sus funciones sepa utilizar como estrategia para accionar, tanto gestionar como liderar, en base a los valores, particularmente: la solidaridad, tolerancia, integridad, honestidad, justicia y compromiso social.
Entendemos por líder, aquel que genera redes de relaciones, motiva a su grupo y de esta manera influye sobre ellos, formando nuevos líderes.
Estos no plantean quejas, sino que observan ampliamente y así, cuando se les presentan dificultades las ven como nuevas oportunidades. Gestionar, es hacer un buen uso de las herramientas con las que el funcionario cuenta para lograr el bien común.
Por lo tanto, creemos que necesitamos funcionarios que no sólo se acomoden al presente en el que vivimos, sino que además hagan todo a su alrededor, para crear otra realidad.
Por eso, a partir de hoy nos comprometemos a crear redes de relaciones internacionales y también a presentar un proyecto donde se creen ámbitos o espacios destinatarios para que ningún ciudadanos duerma en la calle.
Creemos que es de suma importancia, que los funcionarios públicos sean líderes y gestores, debido a que es desde el gobierno y desde hoy, donde se tendrían que empezar a reconstruir los lazos que hagan a la fraternidad y la solidaridad.
Por ello, pedimos como líderes jóvenes de Latinoamérica que desde el Estado se apoyen todas las actividades e iniciativas que surjan, que se defiendan y que se difundan, para llevar a todos la cultura de la paz.
Desde este lugar es que ofrecemos el compromiso necesario para acompañar el proceso que se lleve adelante.
De esta manera, manifestamos nuestros anhelos de lo que deberían hacer los próximos funcionarios públicos, dejando en claro, a esta Honorable Cámara de Senadores de la Nación, que de esta forma, maximizaremos los servicios y recursos disponibles para el bien de toda América Latina.
En estas tres áreas tan significativas hay necesidades urgentes por lo que el grupo propone lo siguiente:
Debemos promover la participación activa de los jóvenes y fortalecer su identidad, para que puedan ser futuros lideres y encontrar en ellos verdaderos investigadores que focalicen su atención en la problemática ambiental, tanto social como ecológicas y desarrollen estrategias de resolución de las mismas.
El líder debe buscar la manera de transmitir el mensaje a través de formas y códigos apropiados, actuando con transparencia, asumiendo y emprendiendo un verdadero compromiso con la sociedad.
El líder debe generar sus propios espacios teniendo una visión crítica constructiva, actuando siempre con justicia, honestidad y lealtad.
El líder debe promover en la comunidad un compromiso basado en la búsqueda de soluciones a las distintas formas de contaminación y depredación de la naturaleza.
Por lo tanto la actitudes que ayudan a conformar el perfil de un líder desde nuestra perspectiva son: la humildad, es decir que tiene que estar abierto a segundas opiniones (dar y recibir), compañerismo, paciencia (para comprender las ideas de los demás). Por otra parte se encuentran actitudes importantes como: contención momentánea, es decir, contener al que lo necesite y auto respeto, que es una base importante para el respeto.
Existe una enorme cantidad de acciones que se pueden hacer para llegar al propósito que todos tenemos en común.
A continuación nombraremos algunas que consideramos importantes:
Para lograr estos objetivos, es necesario fortalecer los siguientes valores:
VALENTIA: para superar los miedos que se nos presentan a la hora de poder expresarnos, si nuestras ideas son diferentes. Consiste en tener la fortaleza interior para desarrollarlas con seguridad y no dejar que nuestros temores no nos permitan superarnos.
PERSEVERANCIA: para cumplir con el objetivo propuesto y como líderes no dejarse vencer por la adversidades.
COMPROMISO Y RESPONSABILIDAD CON EL MEDIO AMBIENTE: consiste en aplicar dichos valores en el aspecto cultural y personal, como así también en el social y ecológico.
INTEGRIDAD IDEOLÓGICA: se trata de mantener coherencia entre pensamientos, palabras y acciones.
El perfil del líder va a ayudar a desarrollar las funciones del grupo al que representa, para llegar al objetivo principal: la paz.
El objetivo en que nos ubicamos fue garantizar la sostenibilidad del medio ambiente, es decir, contribuir a mejorar el entorno tanto externo como interno. Por ejemplo: buscar la manera de comunicarse y relacionarse con otras personas y con uno mismo; purificar el alma y mantener la armonía individual y colectiva, logrando así, mayor intercomunicación.
Esto se puede lograr realizando charlas reflexivas sobre distintos temas que concienticen a las personas, como por ejemplo este seminario.